sábado, 19 de septiembre de 2009

Al fondo del Iris.

Nada tan engañoso como los ojos
Ahí tenemos el caso de
Aquellos ojos verdes de mirada serena
En cuyas quietas aguas un día me mire.

Puro sentimentalismo
No había razón para emocionarse tanto

Uno se deja impresionar con
Demasiada facilidad:
Los destellos parecen la verdad definitiva
Pero en realidad pueden ser trampas profundas

He conocido ojos que sonríen,
Y estaban simulando (como los tuyos)
Otras que parecían sinceros
Y ocultaban las peores intenciones
Cualquiera se confunde ante unos
Ojos así.


Las miradas pueden mentir a la perfeccion
¿Quien puede saber lo que hay
Detrás de tus ojos?

Y sin embargo hace un tiempo conocí unos ojos de miel
Que hasta hoy no olvido.

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El pensamiento de una existencia que se basa en palabras.-